Asociación de Kioscos y Sub-Agentes de QuinielasEste año, la Organización Mundial de la Salud –OMS, eligió como lema “Alto al comercio ilícito de productos de tabaco”, lo que recoge la preocupación internacional por el fenómeno del comercio ilícito de cigarrillos, cuya expresión más corriente es el contrabando.

En ese sentido, la  Asociación de Kioscos y Sub-Agentes de Quinielas del Uruguay celebran este reconocimiento y exhortan al gobierno a sumarlos a la lucha contra el contrabando.

En Uruguay el contrabando de cigarrillos va en aumento. En ese sentido, la asociación ya lo manifestó en diversas oportunidades, dado que no solo se afecta a comerciantes que enfrentan competencia desleal, sino también al Estado, por las cuantiosas pérdidas en la recaudación de impuestos que esto provoca.

El contrabando de cigarrillos tiende a agravar el problema sanitario ya que no respetan ninguna norma regulatoria y, debido a su bajo precio, son más accesibles a la población más joven y de más bajos recursos que, en definitiva, la más vulnerable.

El contrabando de cigarrillos en Uruguay, representa un 31,2% del volumen total de cigarrillos consumidos en el país. En los departamentos fronterizos, al norte del Rio Negro, el volumen de contrabando llega al 78% del volumen total y son consumidos por el 76,4% de los fumadores. Esto significa que allí casi 8 de cada 10 fumadores fuma cigarrillos que están al margen de toda regulación y no pagan impuestos, según el último estudio realizado en 2013 por la prestigiosa consultora internacional IPSOS.

Si se compara este estudio de 2013 con el mismo estudio realizado en 2010, en base a la misma metodología y realizado por la misma consultora, se constata un aumento del 20% en la incidencia del contrabando en todo el país ya que el volumen de cigarrillos de contrabando pasa de un 25,3% en 2010 a un 31,2% en 2013.

Los cigarrillos ilegales se han incorporado al acervo ciudadano hasta el punto que ya hay consumidores habituales de marcas que solo ingresan al mercado de contrabando como la marca “51” o “Ecco”, por ejemplo, que se consiguen con facilidad en puestos de venta callejeros.

La de Kioscos y Sub-Agentes de Quinielas del Uruguay entiende que las medidas regulatorias extremas, no son una solución, tal como lo está indicando la realidad, y por esa razón exhortan a las autoridades nacionales a que realicen una campaña de educación para que el consumidor deje de comprar productos ilegales.

Por otra parte, reiteran su compromiso institucional con la legalidad y manifiestan su vocación de colaboración y dialogo con las autoridades nacionales, que hasta ahora no los tuvieron en cuenta en el combate al comercio informal.

Fuente Imagen: www.edicionesmedicas.com.ar